domingo, 30 de octubre de 2011

RECORRIDO: EL ENCINAREJO - LA LANCHA

     Temprano, en la mañana de ayer, quedamos Raimundo y yo para salir por la Sierra de Andújar. Nuestro punto de quedada, como viene siendo habitual, fue al comienzo de la carretera que sube a la sierra. Yo llegué un poco antes. La mañana, todavía oscura, era húmeda y fresca debido a la niebla. Equivocadamente temí que se podía estropear el día si persistían esas condiciones de visibilidad tan poco propicias para observar animales. Mientras esperaba a Raimundo pude ver algunos gorriones y unos bandos numerosos de estorninos que evolucionaban en formas indefinidas mientras se desplazaban. También pasó una garcilla bueyera.

     Cuando llegó Raimundo, acordamos subir al Encinarejo, y luego a La Lancha. Llevábamos como objetivo buscar al lince, pero no nos dedicamos a ello de forma intensa. A los pocos kilómetros la niebla se disipó y dio paso a un día luminoso. Al borde de la carretera asomó un zorzal común que pronto se volvió a ocultar en el arbusto del que salió al pasar con el coche. Más adelante vimos urracas y rabilargos. Antes de bajar al Jándula, nos percatamos que la niebla se hacinaba en el valle del río.

Perspectiva otoñal de la fresneda del Río Jándula,
envuelta en la niebla.

     Antes de llegar al mirador paramos por el gusto de admirar la belleza del río, de los fresnos, ya casi desnudos de hojas, envueltos por la bruma. Las primeras lluvias han caído muy tarde este otoño, pero han sido bien avenidas por la Naturaleza, que aguardaba con impaciencia despertar de su letargo estival. Los pastos, aunque todavía secos, ya han empezado a quedar aplastados en el suelo tras las lluvias, esperando ser regenerados por la nueva hierba verde, que ya ha empezado a brotar. Una multitud de pequeños pajarillos trinaban en el bosque, para los que el otoño supone una segunda primavera. Entre ellos se oía el del canto del escribano soteño y del ruiseñor bastardo. Al acercarnos al río sorprendimos a una garza real, que levantó el vuelo graznando, y sobre la raíz de un fresno, se posó un petirrojo.


Río Jándula

     Subimos al mirador, pero ni nos detuvimos, viendo que la niebla empezaba a subir, y estaba en ese momento concentrada a esa altura. Preferimos seguir hacia delante, bajar hacia el río, donde la niebla ya se había aclarado. Nada más parar sorprendimos a un chochín posado en un lugar bastante descubierto. Aunque no tardó mucho en cambiar de ubicación y ocultarse, pudimos verlo claramente el tiempo suficiente. Otra garza real pasó volando y graznado sobre el cauce del río, y más altos, pasaron tres escuadras de cormoranes río arriba. El martín pescador, previamente escuchado, también se dejó ver fugazmente, en sus rápidos vuelos batidos sobre el río. Otras aves que se mostraron fueron una abubilla, un pico picapinos, un picogordo, pinzones, mirlos, petirrojos y colirrojos. Algunas urracas, las cuales de vez en cuando cacareaban, atraían nuestra atención sobre ellas. Un cuantioso grupo de escandalosos rabilargos cruzaron el río de lado a lado. Los reclamos de la perdiz y los relinchos del pito real también se oían de vez en cuando, y todavía berreaba algún ciervo.

Telaraña con gotitas de agua condesadas
en sus hilos de seda, consecuencia de la bruma.

     Subimos al mirador, donde ya se había despejado la niebla, pero la luz era muy intensa y molesta para la vista. Además, los primeros domingueros ya habían llegado, y su enemistad con el silencio, nos estaban invitando a marcharnos. El rato que aquí estuvimos, continuamos oyendo algunos ciervos berrear, y acabamos viendo uno. También seguimos escuchando al pito real, hasta que uno cruzó cerca de nosotros, y algunos otros se movían entre los fresnos de en frente. Se escuchaba al mochuelo y al zorzal charlo, pero quien seguía centrando nuestra atención eran las urracas al cacarear. Delante de nosotros, un gran bando de torcaces levantó repentinamente el vuelo, y automáticamente provocó la reacción que barriéramos el lugar con los prismáticos y el telescopio buscando algún posible depredador terrestre que las hubiera asustado. Pero no encontramos nada, y después de que volvieran a repetir tal comportamiento nos dimos cuenta que solo cambiaban de sitio para comer, además por la misma zona, lo que aparentemente podía significar que no hubiera por allí ningún carnívoro que las acechara. Los maullidos de un ratonero también atrajeron nuestra atención, descubriendo un ejemplar que fue a posarse a un pino, de donde más tarde retornó hacia el lugar de donde vino, también maullando.

     Partimos hacia La Lancha buscando la tranquilidad que en el Encinarejo perdimos. Por la carretera seguimos viendo a los típicos córvidos de la sierra, y un pito real sobre un poste. Por la carretera de La Lancha pudimos ver algunas tarabillas, gorriones y perdices, pero lo que exigió que nos parásemos fueron dos individuos dameros de águila imperial volando en compañía de algunos buitres leonados. También conseguimos oír sus reclamos mientras planeaban en el aire. Nos parecía curioso que en todo el tramo que llevábamos no hubiésemos visto ningún ciervo, y de hecho, no vimos los primeros hasta poco antes de llegar a la primera “curva de La Lancha”. Y también, poco antes de llegar a esta “curva”, identificamos un buitre negro volando junto a algunos leonados.

Vareto

     En esta primera “curva”, donde paramos con la idea de buscar al lince, nos acabamos entreteniendo observando a las grandes rapaces de la zona. Al momento de llegar, centramos nuestra observación en buscar el origen de los cacareos de unas urracas cerro arriba. Una vez más se trataba de una falsa alarma. Pero siguiendo con nuestras prospecciones del terreno hacía arriba, descubrimos en el cielo buitres leonados, otra águila imperial, más tres buitres negros, uno de los cuales pasó planeando lentamente sobre nosotros. El siguiente rato se desarrolló sin demasiada actividad, y tan solo se descubrió un arrendajo.
     Cambiamos de sitio, de “curva”, y de paso por otras “curvas” aprovechamos para preguntar a otros naturalistas que allí se encontraban, si habían avistado al lince, a lo que nos respondieron negativamente. La poca atención que prestaban a sus telescopios al pasar, desde luego indicaban que no estaban viendo nada especial en ese momento. Nos alejamos bastante hasta llegar a una de las últimas “curvas”, donde nada más llegar vimos una cierva. Con el telescopio llegamos a ver algún ciervo más, pero parecía haber cesado la actividad de los animales. Al sol hacía calor, lo que favoreció que saliera de entre las rocas una lagartija colilarga. Allí aprovechamos para comer, a la sombra de las encinas, y tan solo oímos al herrerillo común y algunos reclamos de las currucas cabecinegra y rabilarga.
     Antes de regresar, volvimos a parar en la “curva” del principio. De nuevo las urracas parecían nerviosas con sus revuelos y cacareos, pero seguían sin chivar la presencia de ningún lince. Una bandada de palomas, emprendió el vuelo de algún lugar. En el interior de una grieta longitudinal de un poste descubrimos a un atareado pico picapinos, delatado por su constante picoteo.

Ciervo

     El camino de vuelta estuvo más animado que a la ida, con algunas paradas improvisadas, especialmente en el tramo antes de incorporarnos a la carretera general. Vimos bastantes más ciervos, e incluso un pequeño grupo de gamos. Se nos cruzó un pito real, y sobre una piedra descubrimos un mochuelo que nos dejó observarlo durante bastante rato. También volvimos a ver a buitres leonados, tarabillas, urracas y rabilargos. Ya por la carretera general, nuestros avistamientos se limitan a algunos estorninos y tórtolas turcas, pero conseguimos parar en un vado apartado de la carretera para observar a un gavilán cicleando a cielo descubierto.

(*) Fotografías: gentileza de Raimundo Gómez.


Lista de Especies Observadas (Orden Sistemático):

  • Ciervo Rojo (Cervus elaphus)
  • Gamo (Dama dama)
  • Cormorán Grande (Phalacrocorax carbo)
  • Garcilla Bueyera (Bubulcus ibis)
  • Garza Real (Ardea cinerea)
  • Buitre Leonado (Gyps fulvus)
  • Buitre Negro (Aegypius monachus)
  • Gavilán Común (Accipiter nisus)
  • Busardo Ratonero (Buteo buteo)
  • Águila Imperial Ibérica (Aquila adalberti)
  • Perdiz Roja (Alectoris rufa)
  • Paloma Torcaz (Columba palumbus)
  • Tórtola Turca (Streptopelia decaocto)
  • Mochuelo Europeo (Athene noctua vidalii)
  • Martín Pescador Común (Alcedo atthis)
  • Abubilla (Upupa epops)
  • Pito Real (Picus viridis sharpei)
  • Pico Picapinos (Dendrocopos major)
  • Chochín Común (Troglodytes troglodytes)
  • Petirrojo Europeo (Erithacus rubecula)
  • Colirrojo Tizón (Phoenicuros ochruros)
  • Tarabilla Común (Saxicola torcuatus rubicola)
  • Mirlo Común (Turdus merula)
  • Zorzal Común (Turdus philomelos)
  • Zorzal Charlo (Turdus viscivorus)
  • Ruiseñor Bastardo (Cettia cetti)
  • Curruca Rabilarga (Sylvia undata)
  • Curuca Cabecinegra (Sylvia melanocephala)
  • Herrerillo Común (Cyanistes caeruleus)
  • Arrendajo Común (Garrulus glandarius)
  • Rabilargo Ibérico (Cyanopica cooki)
  • Urraca (Pica pica melanotos)
  • Estornino Negro (Sturnus unicolor)
  • Gorrión Común (Passer domesticus)
  • Pinzón Vulgar (Fringilla coelebs coelebs)
  • Picogordo (Coccothraustes coccothraustes)
  • Escribano Soteño (Emberiza cirlus)
  • Lagartija Colilarga (Psammodromus algirus)

domingo, 23 de octubre de 2011

DOBLE SESIÓN DE HIDE: Y POR LA TARDE EN LA SIERRA

     Por la tarde me volvió a llamar David para proponerme otra espera en hide que acepté, esta vez en la sierra. Se trataba de subir a la viña de José Luis Ojeda, donde es fácil que baje el pico picapinos a beber agua en una fuente. En las más de dos horas que estuvimos bajaron varios pájaros, pero no el picapinos, al que en cambio escuchamos por los alrededores.
     De camino hacia las viñas vimos a los habituales rabilargos, y un mochuelo posado en un poste desde el que controlaba sus dominios a media tarde.

Mito

     Cuando llegamos la vida bullía en los alrededores de la casa de campo. Los mirlos, alarmados, y los gorriones levantaron el vuelo a nuestra llegada. Rápidamente montamos el hide junto a la fuente, y no tardaron en bajar los primeros pájaros, los mitos. El verano se está resistiendo a dar paso al anhelado otoño, y los animales se ven forzados a aliviar su sed en los escasos puntos de agua que encuentran. Algunos mitos estuvieron bajando en distintos turnos a beber, pero no fueron los únicos que se acercaron a la fuente. Las distintas especies de paros no tardaron en hacer acto de presencia, y así bajaron el carbonero común y los herrerillos común y capuchino. La curruca capirotada y el petirrojo también se acercaron a tomar unos tragos de agua, pero todos los pájaros dejaban libre la fuente cuando se acercaba el dominante trepador azul. Un mosquitero también estuvo revoloteando por las inmediaciones, pero no entró a la fuente, y desde el hide, a lo lejos, conseguimos avistar un pequeño agateador que ascendía por un poste, que dejó oír su reclamo cuando voló a algún otro sitio en el que yo no lo veíamos. También escuchamos los pitidos del pico picapinos, así como picar la madera de un eucalipto cercano. Y sobre las altas ramas de los eucaliptos se movían algunos estorninos.

Fotografía: gentileza de David Torres.


Lista de Aves Observadas (Orden Sistemático):

  • Mochuelo Europeo (Athene noctua vidalii)
  • Pico Picapinos (Dendrocopos major)
  • Petirrojo Europeo (Erithacus rubecula)
  • Mirlo Común (Turdus merula)
  • Curruca Capirotada (Sylvia atricapilla)
  • Mosquitero Común (Phylloscopus collybita)
  • Mito Común (Aegithalos caudatus irbii)
  • Carbonero Común (Parus major)
  • Herrerillo Común (Cyanistes caeruleus)
  • Herrerillo Capuchino (Lophophanes cristatus)
  • Trepador Azul (Sitta europaea caesia)
  • Agateador Común (Certhia brachydactyla)
  • Rabilargo Ibérico (Cyanopica cooki)
  • Estornino Negro (Sturnus unicolor)
  • Gorrión Común (Passer domesticus)

DOBLE SESIÓN DE HIDE: POR LA MAÑANA EN LA ROPERA

     A David le habían contado que un avetoro estaba parando en la desembocadura del Jándula, así que ayer por la mañana, temprano, decidimos ir en su busca. Aunque nos plantamos con el hide, ocultos entre la vegetación ripícola, a la orilla del río, no hubo suerte con la rara garza. En cambio si avistamos a muchas otras aves en las cuatro horas largas que allí estuvimos.
     En el corto trayecto que separa Andújar de La Ropera vimos algunos gorriones iniciando su actividad mañanera, y un mochuelo, oteando desde un poste, apurando su actividad nocturna.
     Cuando llegamos al sitio, decidimos montar el hide bajo las ramas de un sauce, y comenzó nuestra espera. Las primeras manifestaciones que tuvimos de las aves eran sonoras. La repetitiva estrofa del ruiseñor bastardo, la grave voz del verderón, y los ruidosos graznidos de los rabilargos. Poco a poco se veía alguna gallineta prospectando el borde de la orilla de enfrente, y el río era cruzado por algún mirlo, algún arrendajo, y varios rabilargos. Los patos parecían saber que estábamos allí, y solo pasaban en vuelo siguiendo el cauce.

Lavandera Cascadeña

     La orilla donde estábamos era bastante interesante, puesto que teníamos delante un extenso banco de lodo, y justo en frente un pequeño islote. Una garza real estuvo bastante tiempo posada sobre este banco de lodo, pero muy alejada de nosotros. Los andarríos chicos merodeaban algo más cerca, y de vez en cuando levantaban el vuelo y pasaban cerca de nosotros, dejando oír sus trinos. También acudieron a estos lodos algunos zorzales charlos, pero siempre muy cerca de la espesura de la vegetación del borde. El martín pescador dio varias pasadas, llegando a posarse no solo en la orilla de en frente, si no también en la que estábamos nosotros, cerca del hide, pero oculto entre el follaje de las ramas de los árboles. Las lavanderas, tanto la blanca como la cascadeña, fueron los pájaros más confiados, que más se acercaron a nosotros. Poco a poco también se nos acercaron los andarríos chicos, pero siempre guardando las distancias, e incluso llegaron un par de andarríos grandes al mismo banco, aunque algo lejos de nosotros. Entre la somera vegetación del islote pululaba algún mosquitero y un par de bisbitas. Entre tanto los patos ya habían empezado a nadar en los alrededores de nuestra ubicación, varios reales y algunos frisos. En un momento de calma, en el que ningún ave se observaba por las inmediaciones, apareció una hembra de aguilucho lagunero, volando despacio sobre el río, vigilando el río, buscando alguna presunta presa. Pasado el peligro, la actividad ornítica reapareció en aquel tramo de río. Los ánades reales y frisos volvieron a nadar por allí, los andarríos grandes y chicos volvieron a seguir sondeando aquel lodo de la orillas, las lavanderas volvieron a revolotear en las cercanías. También surgían de la espesura del bosque en galería, carboneros y pinzones, y alguna que otra curruca capirotada que de vez en cuando se paraban en las ramas bajas de los sauces que asomaban a la orilla.

Andarríos Chico

     La mañana había avanzado aproximándose a las horas centrales del día, y poco a poco la actividad de los pájaros disminuyó hasta acabar desapareciendo por completo. Entonces decidimos levantar el hide. Yendo hacia el coche, nos topamos con petirrojo y podíamos escuchar a los pardillos cantar.

Fotografías: gentileza de David Torres.


Lista de Aves Observadas (Orden Sistemático):

  • Garza Real (Ardea cinerea)
  • Ánade Friso (Anas strepera)
  • Ánade Azulón (Anas platyrhynchos)
  • Aguilucho Lagunero Occidental (Circus aeruginosus)
  • Gallineta Común (Gallinula chloropus)
  • Andarríos Grande (Tringa ochropus)
  • Andarríos Chico (Actitis hypoleucos)
  • Mochuelo Europeo (Athene noctua vidalii)
  • Martín Pescador Común (Alcedo atthis)
  • Bisbita Pratense (Anthus pratensis)
  • Lavandera Blanca (Motacilla alba alba)
  • Lavandera Cascadeña (Motacilla cinerea)
  • Petirrojo Europeo (Erithacus rubecula)
  • Mirlo Común (Turdus merula)
  • Zorzal Charlo (Turdus viscivorus)
  • Ruiseñor Bastardo (Cettia cetti)
  • Curruca Capirotada (Sylvia atricapilla)
  • Mosquitero Común (Phylloscopus collybita)
  • Carbonero Común (Parus major)
  • Arrendajo Común (Garrulus glandarius)
  • Rabilargo Ibérico (Cyanopica cooki)
  • Gorrión Común (Passer domesticus)
  • Pinzón Vulgar (Fringilla coelebs coelebs)
  • Verderón Común (Chloris chloris)
  • Pardillo Común (Carduelis cannabina)

jueves, 6 de octubre de 2011

ENCUENTRO JUVENIL EN LITUANIA: VISITA AL PARQUE NACIONAL AUKŠTAITIJA

     El día 28 de septiembre realizamos una visita guiada al Parque Nacional Aukštaitija (Aukštaitijos Nacionalinis Parkas). Nos llevaron a ver un centro de visitantes donde se mostraban los principales valores del parque, un museo de la miel, y aunque resulte chocante: ¡a una torre de telefonía móvil! Supongo que un país donde prácticamente no hay de elevaciones naturales debe resultar atractivo tener una perspectiva visual desde la altura, aunque sea desde una estructura metálica artificial poco integrada en el paisaje, pero aun así yo no subí. El centro de vistantes tampoco fue de mi agrado, pues los animales que mostraban no eran maquetas, si no que se trataban de ejemplares reales que estaban disecados, expuestos como una colección de trofeos cinegéticos. Pero también hicimos paradas en un mirador desde el que se contemplaban lagos rodeados por pinares, y en un pequeño puente que actuaba de presa sobre un río y formaba un pequeño embalse.



Lagos del Parque Nacional






























     El paisaje del Parque Nacional no variaba con respecto al lugar donde estábamos alojados: pinares, solo interrumpidos por praderas y lagos. Y al igual que en los alrededores de Salakas era complicado observar fauna silvestre, y más aún, viajando en un autobús que solo paraba donde tenía previsto hacerlo. Así que me tuve que conformar con ver solo de pasada dos garzas reales y dos cisnes, y también unos pocos arrendajos que se atrevieron a cruzar la carretera.

Cauce de un río estancado por una pequeña presa

Ánades Reales o Azulones reposando en la orilla de un río

     En el pequeño pueblo donde se hallaba el centro de visitantes, integrado en el bosque y cerca de un gran lago, tuvimos bastante tiempo libre, y allí fue donde comimos, en un área recreativa. Algunos invertimos nuestro tiempo en dar un paseo por la zona. Era fácil encontrarse con ranas, en cambio las aves brindaban pocas oportunidades de observación, de las que las cornejas cenicientas eran las que más se dejaban ver. Unas grajillas se delataron por el canto, lo que me permitió localizarlas con facilidad. Andando entre unas viejas cabañas de madera pudimos ver un carbonero, al que descubrimos gracias a su canto, y poco más adelante, entre la hierba del suelo vimos un zorzal real, que salió volando en cuanto paramos para intentar observarlo. También unos pocos gorriones comunes y molineros, separados en distintos bandos, se dejaron ver por el poblado. 

Rana Bermeja

     En los lagos que se veían desde el mirador, a pesar de la distancia, se distinguían algún que otro somormujo, y a las oscuras fochas, nadando en grupo. En el corto rato que estuvimos allí, voló un picapinos por un claro del bosque. En las aguas contenidas por el puente, formando una pequeña laguna, nadaban, confiados de la gente, algunos ánades reales. Y cerca del mismo puente desde donde observábamos los patos, andaba por la carretera una lavandera blanca. Al acercarnos a orillas del río saltaban entre la hierba multitud de ranas bermejas tratando de huir de nosotros, mientras que los patos ni se inmutaban. Aquí presenciamos algo que llamó bastante la atención del grupo. Una gran rana, que al aproximarnos, se lanzó al agua, circunstancia que aprovechó uno de los patos para capturarla. Apresuradamente, el ánade se alejó del resto de sus congéneres, que lo persiguieron para arrebatarle el botín. A pesar de zarandearla y golpearla repetidas veces contra el somero fondo del cristalino río, era incapaz de tragarsela. Aún así, insistía constantemente y tampoco la soltaba. No sabemos si finalmente la engulló, porque tuvimos que marcharnos, pero lo que es seguro que la rana no viviría para contarlo. Mientras el grupo subía a la torre, en la que fue nuestra última parada al final de la tarde, aproveché para dar una vuelta por los alrededores, lo que me permitió encontrar un par de montículos de hormigas rojas. Cuando el grupo bajaba de la torre para marcharnos, pasó una bandada de ánsares en su característica forma de V.

Perspectiva de un lago y del pinar del Parque Nacional
































(*) Fotografías: gentileza de Marta Negrillo y Patricia Zamora (orden alfabético).


Lista de Especies Observadas (Orden Sistemático):

  • Somormujo Lavanco (Podiceps cristatus)
  • Garza Real (Ardea cinerea)
  • Ánsar Común (Anser anser)
  • Cisne Vulgar (Cignus olor)
  • Ánade Azulón (Anas platyrhynchos)
  • Focha Común (Fulica atra)
  • Pico Picapinos (Dendrocopos major)
  • Lavandera Blanca (Motacilla alba alba)
  • Zorzal Real (Turdus pilaris)
  • Carbonero Común (Parus major)
  • Arrendajo Común (Garrulus glandarius)
  • Grajilla Común (Corvus monedula)
  • Corneja Cenicienta (Corvus cornix)
  • Gorrión Común (Passer domesticus)
  • Gorrión Molinero (Passer montanus)
  • Rana Bermeja (Rana temporaria)

martes, 4 de octubre de 2011

ENCUENTRO JUVENIL EN LITUANIA: ESTANCIA EN EL PARQUE REGIONAL GRAŽUTĖS

     Entre los días 22 de septiembre y 2 de octubre he asistido a un encuentro juvenil (youth path) que ha tenido lugar en Lituania, en el que hemos convivido lituanos, italianos, alemanes y españoles (ocho personas por cada país). El grupo español fue invitado por Rocío, quien lleva viviendo allí casi medio año. Durante la semana que duró el encuentro, estuvimos alojados los cuatro grupos en una casa de Salakas, un pequeño pueblo del Condado de Utena (Utenos), en el Parque Regional Gražutės (Gražutės Regioninis Parkas). Las actividades del youth path, en general, no contaban con el visto bueno de los españoles, que a veces considerábamos absurdas o ambientalmente incorrectas, y eludíamos participar en ellas. Los dos últimos días estuvimos por nuestra cuenta visitando Vilnia (Vilnius), la capital de Lituania.  

Taiga o Bosque Boreal

Pinar
     El bioma dominante del Parque Regional, y más representativo de Lituania, es el bosque boreal o taiga, la densa selva forestal característica del norte, formada por coníferas y altos pinos silvestres, que bruscamente desaparecen para dar paso a complejos lagunares o a verdes prados, marcando una frontera natural muy definida, sin ecosistemas de transición o formaciones vegetales intermedias. En definitiva, un paisaje homogeneo, sin altas montañas ni lejanos horizones. Entre los pinares también se mezclan algunos robles, píceas, abetos y alerces. El suelo del bosque aparecía forrado por pinocha y musgos, y sobre el mismo se encontraba una gran diversidad de setas (Boletus sp, Amanita sp, Russula sp, Macrolepiota sp, etc). En los alrededores de los lagos crecen los abedules. La tupida vegetación forestal, unida a una época poco propicia para observar aves, dificultó bastante poder realizar esta apasionante afición, siendo imposible de realizar en los espacios abiertos de las praderas.

Rana Bermeja














     El pueblo de Salakas no está constituido por un nucleo rural conectado, si no por casas dispersas, separadas entre si por zonas verdes más o menos amplias. Entre estas zonas ajardinadas, de vez en cuando teníamos ocasión de ver algún que otro mosquitero, colirrojo, petirrojo, carbonero o herrerillo, o algún reducido bando de gorriones molineros. Ocasionalmente también se dejaba ver el zorzal real sobre el cesped de alguna parcela, aunque pronto acudía refugiarse a algún seto. La única ave que andaba con regularidad por las calles era la lavandera blanca, pero las que se podían ver más facilmente era las cornejas cenicientas volando sobre los tejados de las casas y a veces posadas en algún árbol. También, cierto día, llegué a observar unas pocas grajas.

Prado, limitado al fondo, por un denso bosque de coníferas



Hembra de Lagartija de Turbera





























     Cerca de Salakas hay un lago al cual íbamos casi todos los días dando un paseo, hasta un área recreativa junto a una orilla, o bien para recorrer su entorno. Las ranas bermejas abundaban por doquier, y era fácil sorprenderlas al caminar, saltando entre la hierba. En cambio resultaba más complicado observar las ranas verdes, más ligadas al agua, y por lo tanto solo era posible encontrarlas a veces, prospectando la orilla. También se veían libélulas con cierta facilidad en los alrededores del lago. Sobre sus aguas era relativamente fácil observar nadando somormujos, cormoranes, azulones, y algún grupo de fochas. También a veces se veían algunas gaviotas sobrevolando su superficie. Un escribano palustre fue el único paseriforme que pude observar un día entre la vegetación lacustre. Un día soleado pudimos ver una lagartija de turbera en el área recreativa.

Fochas Comunes nadando en el lago cercano a Salakas


Rana Verde Europea




























     Otras veces nuestras andanzas nos llevaban a adentrarnos en los pinares. Sobre las copas a veces sobrevolaba alguna corneja, y más altos, algunas escuadras de ánsares en migración. El pico picapinos lo escuchábamos por su característico tamborileo sobre un tronco, y con algo de paciencia a veces lo descubríamos en vuelo hasta que lo perdíamos de vista. Otras veces conseguíamos ver donde se posaba. Solo de vez en cuando pude ver algunas urracas, y lo mismo se puede decir del mirlo. En el interior de los bosques solía reinar el silencio, y a veces resultaba muy complicado averiguar el origen de los pocos sonidos que se escuchaban. Un día, escudriñando con los prismáticos un abeto del que previamente había escuchado un agudo sonido, conseguí llegar a ver un reyezuelo sencillo. Las ranas bermejas las veíamos con facilidad, y hasta llegamos a encontrarnos en un camino con un pequeño sapo común. En otra ocasión también llegamos a encontrar un gran montículo que constituye el hormiguero de las hormigas rojas.

Sapo Común

(*) Fotografías: gentileza de Marta Negrillo y Paricia Zamora (orden alfabético).


Lista de Especies Observadas (Orden Sistemático):

  • Somormujo Lavanco (Podiceps cristatus)
  • Cormorán Grande (Phalacrocorax carbo)
  • Ánsar Común (Anser anser)
  • Ánade Azulón (Anas platyrhynchos)
  • Focha Común (Fulica atra)
  • Pico Picapinos (Dendrocopos major)
  • Lavandera Blanca (Motacilla alba alba)
  • Petirrojo Europeo (Erithacus rubecula)
  • Colirrojo Tizón (Phoenicurus ochruros)
  • Mirlo Común (Turdus merula)
  • Zorzal Real (Turdus pilaris)
  • Mosquitero Común (Phylloscopus collybita)
  • Reyezuelo Sencillo (Regulus regulus)
  • Herrerillo Común (Cyanistes caeruleus)
  • Carbonero Común (Parus major)
  • Urraca (Pica pica pica)
  • Graja (Corvus frugilegus)
  • Corneja Cenicienta (Corvus cornix)
  • Gorrión Molinero (Passer montanus)
  • Escribano Palustre (Emberiza schoeniclus)
  • Lagartija de Turbera (Zootoca vivipara)
  • Sapo Común (Bufo bufo)
  • Rana Bermeja (Rana temporaria)
  • Rana Verde Europea (Pelophylax lessonae)